A pesar de ser unos insectos nada agresivos ni peligrosos, hemos de reconocer que el hecho de percatarnos de la presencia de hormigas en nuestro hogar, supone un problema y nos convierte en sus ”enemigos públicos número uno”, hasta conseguir acabar con ellas. Pero este no siempre va a resultar un logro fácil de alcanzar.
En este sentido, no vale cualquier método para erradicar a nuestros “incómodos” visitantes. En realidad, no es difícil encontrar a alguien que nos pueda contar varios intentos fallidos, por no haber conseguido llegar totalmente a la raíz del problema.
En este post queremos darte una serie de remedios caseros que, en condiciones normales, deben lograr erradicar esta desagradable situación.
El primer paso será siempre intentar localizar el punto más exacto posible de donde salen las hormigas. Tenemos que encontrar el hormiguero. Es muy probable que éste se encuentre fuera de tu casa, aunque de ser así, no estará demasiado lejos. Si no atinamos a encontrarlo, al menos, deberemos concretar el punto de entrada a nuestra casa.
Otra máxima muy recomendable para luchar contra las hormigas es mantener nuestra casa limpia, libre de restos de comida por el suelo y las encimeras, y conservar todos los alimentos bien guardados y en recipientes adecuados, pertinentemente cerrados.
Vierte agua hirviendo en el hormiguero. Si hemos localizado la guarida de las hormigas, podremos intentar destruirlo poniendo un recipiente con agua al fuego y verterlo cuando ésta empiece a hervir.
Canela en polvo y clavo. Esparcir esta mezcla de especias por los lugares donde habitualmente las veas entrar, ayudará a ahuyentarlas y a que se alejen.
Mezcla de bicarbonato de sodio y azúcar. Es otra mezcla explosiva que si la repartimos por puertas y ventanas, hará que se alejen, puesto que se trata de una mezcla muy nociva para ellas.
El zumo de limón las puede llegar a matar. Por lo tanto, podemos exprimir varios limones y, ayudándonos de un pulverizador de spray, esparcirlo por donde haya hormigas.
El aspirador, para eliminar las que nos encontremos por los distintos rincones de la casa. Si pasamos el aspirador por toda la casa, acabaremos con todas las que nos vayamos encontrando. No es un remedio definitivo porque sólo eliminaremos las que se encuentren fuera del hormiguero y al día siguiente, casi con total seguridad, aparecerán más.
Si ninguno de estos métodos te ha funcionado, siempre te queda la opción más efectiva: ponerte en manos de una empresa especializada, que aporte su experiencia profesional en este tipo de acciones y que garantice un resultado definitivo, seguro y duradero.